Con el paso del tiempo, el mercado y la sociedad van cambiando, requiriendo de profesionales y especialistas con nuevas herramientas y conocimientos. En el caso del MBA, relacionado con un sector en constante mutación, esto se ve claramente. ¿Qué se necesita hoy, entonces, de un master de este tipo?.
Es evidente que junto a los cambios de la sociedad, vertiginosos y constantes, las propuestas formativas deben incorporar variantes que permitan la inserción de los egresados en los nuevos escenarios. Esta imprescindible actualización de los contenidos universitarios de grado y postgrado debe darse también en el caso de los masters enfocados al área de la administración de empresas. Por consiguiente, podemos decir que está surgiendo un nuevo modelo de MBA.
Las principales tendencias de estos nuevos postgrados se sustentan en algunos pilares o ítems centrales. Uno de ellos es la metodología de estudio. Puede advertirse, en consecuencia, como crecen las propuestas part-time u online, para que los alumnos puedan especializarse y, al mismo tiempo, comenzar o continuar su carrera laboral.
Flexibilidad
Lógicamente, resulta complejo en el mundo actual poder dedicarse de lleno a una formación de postgrado, sin combinar la misma con la actividad profesional. Estos nuevos MBA, en consecuencia, ofrecen una mayor flexibilidad horaria y permiten una organización más personalizada de los tiempos del alumno.
Aunque el MBA sigue brindando una formación general e integral del mundo de la empresa, un conocimiento ampliamente competitivo en el mercado actual, desde diversos sectores se ha criticado su falta de modernización en cuanto a ciertos contenidos y tópicos.
Las especializaciones
De esta manera, ha nacido una tendencia con gran fuerza en la actualidad: el MBA especializado. Estas formaciones buscan cubrir los huecos que habitualmente deja la formación de grado en algunas áreas, como pueden ser la gestión de recursos humanos, la comercialización y la investigación de mercados o la gestión de calidad, entre otras.
Es así que el MBA del siglo XXI parece ser una formación de postgrado más abierta en cuanto a las metodologías de aprendizaje, y más especializada desde los contenidos. También se busca que el egresado adquiera un mayor desarrollo personal en la misma capacitación, y no que ingrese al sector laboral sin conocer su área de especialización o sin manejar las herramientas básicas del desempeño profesional.
En resumen, el gran desafío será poder combinar un panorama estratégico del mundo de los negocios con la especialización en un campo concreto, junto al desarrollo de nuevas metodologías de aprendizaje que no signifiquen pérdida de calidad académica. Estos puntos marcarán la suerte del nuevo modelo de MBA.