La cuenta corriente está dirigida a personas naturales y jurídicas que les permite disponer de los fondos de forma inmediata. Estas cuentas no generan intereses mensuales sobre el saldo actual y para realizar las operaciones se puede hacer a través de chequeras.
El titular de una cuenta corriente puede retirar una parte o la totalidad del dinero en el momento que lo desee. Esto lo puede hacer a través de la banca electrónica, con cheque, por los cajeros automáticos o realizar pagos en los comercios con la tarjeta de débito.
¿Qué es una cuenta corriente?
La cuenta corriente es un producto financiero que permite al titular manejar su dinero con tarjeta de débito y con chequera. Este tipo de cuenta puede ser operada por una o varias personas siempre que se establezca la condición al momento de la apertura.
Este producto está dirigido a personas jurídicas o físicas que tienen la necesidad de operar grandes cantidades de dinero. Pero no es recomendada para ahorrar debido a que no genera intereses y en caso de que los genere la tasa es muy baja.
Las instituciones financieras cobran una comisión por el manejo de este tipo de cuentas que suele ser más alto que una cuenta de ahorro tradicional.
Características de una cuenta corriente
Las cuentas corrientes tienen como principal característica que se pueden realizar operaciones con cheques y con tarjetas de débito. Permite la domiciliación de pagos de servicios y créditos con cargo automático a la cuenta, lo único es que no dispone de tasas de interés ni de rendimientos.
La apertura de este tipo de cuenta requiere de una cantidad específica, la cual es establecida por la institución financiera. La primera chequera que se emite no tiene ningún costo, pero el costo de las siguientes va a depender del número de cheques.
Las instituciones bancarias permiten sobregiros en este tipo de cuentas y funciona como un préstamo para el consumo inmediato. Pero el dinero debe ser depositado nuevamente entre 15 y 30 días.
Requisitos para la apertura de una cuenta corriente para una persona natural
Los requisitos mínimos que debe cumplir una persona natural para aperturar una cuenta corriente son los siguientes:
El documento de identidad en original y copia.
Dos referencias de personas, donde se manifieste la idoneidad económica y moral del solicitante.
Documentos que certifiquen el nivel de ingresos del solicitante.
Constancia de domicilio.
Requisitos para la apertura de una cuenta corriente para una persona jurídica
La persona jurídica para la apertura de una cuenta corriente debe cumplir los siguientes requisitos:
Documentos constitutivos de la empresa y de inscripción en el Registro Público.
Dos referencias de personas, donde se haga constar la idoneidad económica y moral de la empresa y de su representante legal.
Documentos que certifiquen el nivel de ingresos de la empresa.
Poder notariado en original y copia donde se autoriza al representante legal a operar la cuenta corriente.
El Número del Registro Único de Contribuyentes (RUC) perteneciente a la persona jurídica.
El documento de identidad en copia y original de la persona autorizada para operar la cuenta corriente.
Constancia de domicilio.